
¿Cuántos de vosotros habéis oído hablar de vinos húngaros?
Aunque no sean tan conocidos como los de otras regiones, los vinos húngaros son verdaderamente interesantes, no solo por su características de aroma y sabor, sino también por su historia, muy relacionada con el territorio. Un valor que sin duda representa el proyecto Szent Tamás.
Esta bodega húngara se encuentra en el corazón de la región de Tokaj, en el pueblo de Mad. Un pueblo que tiene el área más grande de viñedos en la región. Los viñedos los cuales forman parte de este proyecto fueron ya clasificados a principios del siglo XVIII. En esta clasificación única, algunos de los viñedos del pueblo de Mad, ubicados en las laderas de los volcanes inactivos, fueron reconocidos como de primera clase.
Los miembros de la familia Szepsy han producido vinos en la región de Tokaj desde el siglo XV, siendo el enólogo actual de la bodega, Szepsy István Jr, la 18ª generación de productores de vino.
Viñedos Szent Tamás
La compañía posee 25 hectáreas de viñedo, casi la totalidad de ellas se encuentran en áreas de primera clase, trabajando en once parcelas diferentes. La mayoría de estos están ubicados en Mad, pero también tienen viñedos en Tallya, Tarcal y Ratka.
El gran activo a destacar de esta bodega son sus viñedos, por sus características de suelo y orientación que luego dan lugar a diferencias entre parcelas cuando probamos cada uno de sus vinos, desarrollando un gran potencial. Sus viñedos situados en Szent Tamás, Percze, Nyulászó, Kővágó, Király y Dongó se declararon “First Growth” en la clasificación de Tokaj realizada por J. Matolai en 1732.
La gran calidad de sus vinos se debe a la perseverancia y esfuerzo en cumplir su único objetivo, que es presentar los sabores únicos que se originan en las diferentes estructuras de suelo de sus viñedos. Dentro de sus viñedos también hay parcelas que sobresalen sobre las otras, y gracias a ellas elaboran vinos de producción limitada excepcionales.
Vinos Szent Tamás
Los vinos secos, de añada y los vinos dulces son fermentados y madurados en barricas de 300-500 l. de roble húngaro de primero, segundo y tercer año. Las barricas están hechos de roble con tostado medio de la montaña Zemplén, en la frontera norte de nuestra región vinícola.
Los vinos Szent Tamás secos son embotellados después de pasar 8-10 meses en roble. No usan levaduras comerciales en ninguno de sus vinos.
Los vinos Szent Tamás tienen gran potencial de guarda por lo que es recomendable airearlos e incluso jarrearlos para romper esa austeridad inicial y conseguir que desplieguen todo su potencial aromático.
¿Te animas a probarlos? Ven a Enoteca Vinateros y disfruta de ellos!!